La gente es gente cuando son anónimos.

Las personas, con su usual miedo al ridículo o al no ser aceptados, no pueden preguntarte según qué cosas cuando saben que las conoces, ¿cobardía? puede ser, pero el comportamiento "políticamente correcto" está usado en demasía y exagerado hacia límites insospechados. Nadie va a tirar piedras a su propio tejado, la gente adora ser hipócrita, es algo que les da por ser, y les da por poner en su lista de "No me gusta". 


-Oh sí!, yo odio la hipocresía, y los mentirosos. 


Sin embargo esa persona se enfadaría contigo si fueses honesto y le dijeras "Sí, esos pantalones te hacen gorda" por ejemplo.
Porque los hipócritas, aunque digan que no, esperan hipocresía, la adoran. La gente no quiere saber la verdad, quieren conocer "la verdad", la cual es normalmente una versión light y no tan maligna de las mentiras absolutas, o como se las suele llamar "mentiras piadosas" pero una mentira piadosa sigue siendo una mentira, y seguiría alimentando esa realidad defectuosa donde eres una diva con gente que te adora, que nunca te fallarán, y con otras personas, que te hieren, pero no porque sea tu culpa o porque te hayas comportado como una harpía, sino porque son malos, malévolas criaturas que quieren arrebatarte ese mundo tan perfecto en el que vivimos.

2 comentarios:

  1. Oh, Me encantó. & no es un mentira :P
    ¿De dónde lo sacaste? ¿O lo escribiste vos?

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  2. Hm, no te conozco. ¿Hablamos?
    Por cierto, concuerdo.

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